domingo, 9 de mayo de 2010

SENTIR DEL ADOLESCENTE

Mi madre querida
Recuerdo cuando perdía los zapatos y el piso era demasiado frio para caminar, me entristecía porque nadie venía a ayudarme, cuando estaba a punto de llorar tú llegabas con una sonrisa única y me hacías pisar tus empeines, caminábamos coordinadas , eran dos almas conectadas en ese instante: éramos tu y yo.
Hace un año, te aseguro, hubiera sido muy difícil hablar de ti. El tenerte a más de 1000 kilómetros lejos de mi hacía sentir tu ausencia y el escuchar tu voz por un auricular no era suficiente, yo necesitaba esos momentos juntas, esas conversaciones absurdas de algún tema importante. Yo te necesitaba.
Te necesitaba por miles de razones, y por solo una. Es simple, te necesitaba porque eres mi mamá y tu más que nadie puede entenderme, puede leer mis ojos y descifrar lo que mi mente maquina, es ese don tuyo que me hace reír en el momento indicado, aun sin tú saberlo.
Es porque tu complejidad es tan simple, es como una suma vista al revés, es esa unicidad la que me hace quererte cada día más. Me gustas porque confías en mi con los ojos cerrados y sé que por mi pones las manos al fuego, eso me hace ir por el buen camino y así satisfacerte, así demostrarte que estos 16 años juntas no han sido en vano, que cada día cuenta.
Cada día cometo errores, pero es más bonito cometerlos juntas y enmendarlos a la vez. Me gusta cuando me corriges, así puedo contar contigo para lo bueno y lo malo, me gusta contarnos secretos por las noches antes de dormir y reírnos de tonterías, me gustas porque eres distinta a mí, porque me complementas, porque somos yin-yang.
Nuestras personalidades son opuestas , aun así encajan exactamente y dan como resultado una melodía agridulce que cantamos diariamente, sé que hay muchas cosas que he callado, son varias otras las que encierras. Descubrirlas es el reto, es un juego de dos que vamos ingeniando día a día, la recompensa es una sonrisa mutua, un par de cosquillas y muchas risas.
Así como te describo suenas perfecta. Tienes una inocencia de niña en una mujer de casi cuarenta, eres la persona más cómica del mundo y a la vez seria, eres el viento; vas contra la marea, eres simple, eres compleja. ERES MI MADRE. (Natali LE -made_in11@hotmail.com-).

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